Sabores auténticos
y sostenibles

de la Tierra de Teruel

Sumérgete en una experiencia sensorial única, donde la tradición y sostenibilidad se fusionan en aromas, sabores y texturas que conquistan desde el primer instante.

Aurumium

Origen

Nuestro nombre, Aurumium proviene de la unión de aurum, oro en latín y del sufijo -ium, utilizado para denominar nuevos elementos químicos. Con nuestro nombre tratamos de transmitir nuestra misión:

Nos gustan los aromas tradicionales, los sabores con carácter y la buena compañía para degustarlos.

Nuestros Productos

Descubre la gama

Aurumium presenta su cuidada selección de productos exclusivos orientados a potenciar los aromas y sabores de tus platos. Teruel es nuestra casa, obtenemos productos de alto valor gastronómico. Nos gusta apostar por el medio rural para potenciar sus valores como la calidad, la sostenibilidad y el buen hacer.

El Azafrán en Hebra es una especia de lujo, por su intensa y luminosa tonalidad amarilla con enorme potencial en la cocina que confiere un toque de distinción a cada plato.

La Flor de Sal es una fina capa de cristales que se forma de manera natural en la superficie de las salinas y se recolecta artesanalmente para preservar su pureza.

En nuestra selección de Trufas, garantizamos la máxima calidad en cada pieza, asegurando que tanto su sabor como su apariencia cumplan con los más altos estándares.

La historia del "Oro rojo"

Azafrán en Teruel

El azafrán es una planta, según investigaciones, que ya usaban los faraones en el antiguo Egipto en el 2300 a.c.

El cultivo del azafrán parece haberse extendido del oriente al occidente. Las referencias del cultivo del azafrán en Teruel se remonta a principios del siglo XII. La provincia de Teruel viene siendo referente durante siglos en la producción de azafrán; más por su calidad que por su cantidad.

El azafrán de Teruel es considerado de calidad superior por la flor, los procesos de recogida y extracción de las hebras y el tostado. El clima seco y continental de la zona, con inviernos muy fríos y veranos sofocantes, aportan un extra a la flor en su desarrollo de los estigmas.

El azafrán que se cultiva en Teruel, es de una calidad excepcional y se cotiza al doble o triple de precio que el de otros países y la explicación tiene que ver con la calidad de la flor, los procesos y el resultado: más sabor, más color, más olor y más delicado.